Yo no sé cómo saltar
de la orilla de hoy
a la orilla de mañana.
El río se lleva, mientras,
la realidad de esta tarde,
a mares sin esperanza.
Miro al oriente, al poniente,
miro al sur y miro al norte...
Toda la verdad dorada
que cercaba al alma mía,
cual con un cielo completo,
se cae, partida y falsa.
...Y no sé cómo saltar
de la orilla de hoy
a la orilla de mañana.